El Servicio de Administración Tributaria (SAT) ha anunciado una medida que transformará la relación entre la autoridad fiscal y las plataformas digitales. Con la propuesta de incorporar el nuevo artículo 30-B al Código Fiscal de la Federación (CFF), el SAT busca tener acceso en tiempo real a la información de las plataformas digitales que operan en México, como parte de su estrategia para modernizar la supervisión y garantizar la equidad tributaria.
Este cambio representa un paso adelante en la fiscalización electrónica y abre un nuevo escenario para los contadores, despachos y empresas que brindan servicios o generan ingresos a través de plataformas digitales. Lejos de interpretarse como una medida punitiva, la iniciativa refuerza la transparencia y la confianza en el sistema tributario nacional.
Qué establece el nuevo artículo 30-B sobre las plataformas digitales
El artículo 30-B del CFF plantea que el SAT podrá establecer conexiones electrónicas seguras y permanentes con las plataformas digitales, tanto nacionales como extranjeras, para revisar de manera automatizada las operaciones económicas que se realicen a través de ellas.
Esto no significa que el SAT realizará auditorías directas o revisará información personal, sino que accederá a datos operativos y fiscales con el propósito de verificar que los ingresos generados por las plataformas digitales sean correctamente declarados. La intención es promover la equidad fiscal en el ecosistema digital, garantizando que todos los contribuyentes cumplan con sus obligaciones de manera uniforme.
El acceso en tiempo real será definido mediante reglas de carácter general, donde el SAT precisará los estándares técnicos, medidas de seguridad y procedimientos de conexión. Así, las plataformas digitales deberán preparar sus sistemas para operar bajo un esquema de supervisión digital continua.
Quiénes serán los principales involucrados
Esta medida impactará a todas las plataformas digitales que operan en México, incluyendo servicios de transporte, hospedaje, educación, entretenimiento, comercio electrónico y entrega de productos. También afecta a los usuarios y prestadores de servicios que generan ingresos mediante estas plataformas, como conductores, anfitriones, freelancers o vendedores.
Los despachos contables y asesores fiscales también tendrán un papel clave: deberán orientar a sus clientes para adaptar sus registros, procesos de facturación y controles internos a esta nueva realidad.
En caso de que una plataforma digital no otorgue el acceso requerido por el SAT, se prevén sanciones económicas, suspensión temporal del RFC o incluso la restricción temporal de operaciones, hasta que se regularice la situación.
Beneficios y oportunidades para la contabilidad fiscal
Aunque a primera vista la medida podría interpretarse como un control más estricto, en realidad representa un avance positivo para la modernización de la contabilidad fiscal en México.
El acceso en tiempo real permitirá al SAT reducir errores, evitar evasión y agilizar procesos de revisión. Para los contribuyentes, esto se traduce en mayor certeza jurídica, menos requerimientos imprevistos y una relación más fluida con la autoridad.
Las plataformas digitales y los contadores podrán beneficiarse al automatizar procesos de registro, conciliación y envío de información. En lugar de depender de declaraciones mensuales o anuales, los datos estarán disponibles de forma inmediata, fomentando una contabilidad más precisa, transparente y eficiente.
Además, esta medida coloca a México en una posición competitiva dentro de la economía digital, alineándose con las prácticas fiscales de países que ya aplican sistemas de supervisión electrónica avanzada.
Cómo deben prepararse las empresas y contadores
- Revisar y actualizar los sistemas contables.
Es indispensable que las empresas y plataformas digitales verifiquen que sus sistemas de registro cumplan con los requisitos técnicos que el SAT establecerá. - Fortalecer la ciberseguridad y la gestión de datos.
El intercambio continuo de información fiscal requiere protocolos sólidos de seguridad, cifrado y control de accesos. - Capacitar al personal contable y técnico.
Los equipos deberán comprender cómo funciona la conexión en tiempo real y cómo mantener la integridad de la información. - Actualizar contratos y políticas de privacidad.
Las plataformas digitales deberán reflejar en sus avisos legales el cumplimiento de las nuevas disposiciones fiscales. - Monitorear las reglas que emita el SAT.
Las reglas de carácter general establecerán los detalles operativos del artículo 30-B; es fundamental mantenerse informados para evitar incumplimientos involuntarios.
Por qué las plataformas digitales deben verlo como una oportunidad
Más que una carga administrativa, este cambio puede impulsar a las plataformas digitales a fortalecer su infraestructura fiscal y contable.
El monitoreo en tiempo real reducirá la posibilidad de discrepancias, facilitará la emisión de facturas automáticas y permitirá una planeación tributaria más efectiva.
Para los usuarios que generan ingresos dentro de estas plataformas, el beneficio será la claridad: sabrán que sus operaciones están registradas correctamente y podrán demostrar cumplimiento de forma inmediata ante cualquier requerimiento.
La transparencia generará confianza en los mercados digitales y contribuirá al crecimiento sostenible del sector.
El papel de los contadores en la era de la fiscalización digital
La contabilidad fiscal se transforma junto con la economía digital. El contador deja de ser solo un registrador de operaciones para convertirse en un asesor estratégico que interpreta datos en tiempo real y ayuda a las empresas a cumplir de manera proactiva.
Integrar herramientas tecnológicas, automatización contable y reportes sincronizados con el SAT será clave para mantenerse competitivo. Los despachos que se actualicen ofrecerán mayor valor a sus clientes, reduciendo riesgos y aumentando la eficiencia operativa.
Preguntas frecuentes sobre el acceso del SAT a las plataformas digitales
¿El SAT podrá ver los datos personales de los usuarios?
No. El acceso en tiempo real se limita a información fiscal y operativa, sin incluir mensajes, historiales personales o contenidos ajenos a las operaciones económicas.
¿Qué plataformas digitales estarán obligadas?
Todas las que generen ingresos por servicios o ventas en México, sin importar si son nacionales o extranjeras.
¿Qué pasa si una plataforma no permite el acceso al SAT?
Podrá enfrentar sanciones económicas o suspensión temporal de su registro fiscal hasta que cumpla con las disposiciones.
¿Cuándo entrará en vigor esta medida?
Se prevé que sea parte del paquete económico 2026, una vez aprobada por el Congreso y publicada oficialmente.
¿Qué deben hacer los contadores desde ahora?
Auditar sistemas, capacitarse en fiscalización digital y preparar a sus clientes para un entorno de supervisión electrónica continua.
Reflexión final
El acceso del SAT a las plataformas digitales marca el inicio de una nueva era en la contabilidad fiscal mexicana. Este avance no debe verse con desconfianza, sino como una señal de evolución institucional y compromiso con la transparencia.
México se adapta a la economía digital con una autoridad moderna, y los contribuyentes tienen la oportunidad de fortalecer su cumplimiento, profesionalizar sus procesos y contribuir a un sistema tributario más justo y eficiente.



